Es difícil de entender lo se, pero quiero decir que no hay que buscarle respuestas a absolutamente todo lo que ocurre a nuestro alrededor. A veces, lo bonito es no saber nada. Simplemente disfrutar y dejarse llevar por la magia de la incertidumbre.
Cuando alguien no para de cuestionarse sucesos que han ocurrido o están por ocurrir, no se da cuenta, pero no está viviendo el presente como tiene que vivirlo. Eso es un error fatal que hay que evitar. Hay que vivir cada día en el presente y dejar de perder el tiempo en momentos pasados. Hay que vivir cada día como si fuera el último. Tener una serie de objetivos fijos y perseguirlos; pero viviendo la vida día a día. Vivimos demasiado estresados preguntándonos todo. ¡Descansemos un poco! Evitemos hacernos cuestiones que seguramente no encontremos nunca la respuesta. Si algo surge de manera enigmática y extraña, no te preguntes por qué surgió. Pues tal suceso incomprensible no tendrá respuesta. Simplemente vívelo y aprende de él.
Todo esto lo digo porque yo soy uno de ellos. Mucho tiempo me he preguntado el porque de algo que significó mucho para mí. Me he martirizado y he perdido mucho tiempo de mi vida en buscar una respuesta a tal enigma. Tal vez por esperanza o por obsesión de conocimiento. Lo que importa es que hay que evitar perder así el tiempo. Si vuelve a suceder aquello que he vivido será por algo. Y si sucede, no me volveré a preguntar el porqué y simplemente aprenderé del pasado para corregir los errores y aprovecharé el momento.
"Lo bonito de la vida es la incertidumbre de lo que pueda ocurrir sin previo aviso"
No hay comentarios:
Publicar un comentario